domingo, 31 de marzo de 2013

No tan santo.

En domingo de pascua, Unión Vecinal viajó hasta la lluviosa Lezama a enfrentar al local Lezama FC para completar la jornada número 4.
Lamentablemente, la fecha no llegó a culminarse por que antes de finalizar la primera parte del partido, dos jugadores Lezamense agredieron físicamente al árbitro que inmediatamente dió por finalizado el cotejo. El albiazul iba ganando hasta ese momento por 1 gol contra 0, con tanto de Mauro Campagner.
En cancha mojada, piernas fuertes, así se jugaron los únicos 40' minutos del partido incompleto.
La UVE salió a la cancha con: Giampieri; Simoncini, Sparvieri, Rebainera, Boyko; Rosli, Campagner C, Morgades, Filippi; Campagner M y Moleiro (c). En el banco se encontraban: Toris, Ruiz, Loto, Bejarano, Guadarrama. DT: Sparvieri.
El local, Lezama FC formó con: Aenlle, Anderson, Cabrera, Corredoira, Dominguez, Iriarte, Gutierrez, Landa, Machicote, Peralta, Zabalegui.
Desde los primeros minutos de juego se vio un disputado y brusco juego, con entradas fuera de tiempo y demás infracciones peligrosas.
Por el lado del local, muchos centros al área de Giampieri que no pasaron más que un tímido peligro. Vecinal jugaba bien al contra ataque de los puntas Campagner, Moleiro y Filippi.
Varias tarjetas amarillas repartidas por lado y un marcador que se abrió a los 23 de esa primera etapa. Jugada de pizarrón elaborada por Moleiro a través de un tiro libre cerca del área, que terminó en la red ante un remate cruzado de Campagner.
Desde ese momento, ante la falta de precisión en los minutos anteriores, el visitante tomó el balón y lo hizo recorrer todo el campo en posesión a favor. Se agrandaba la confianza de los dirigidos por Sparvieri y se empezó a ver la desesperación del local.
Sobre los 34', diez minutos después del primer gol, el local se va a quedar con un hombre de menos, tras faltas reiteradas de su número 10, que merecía irse a las duchas varios minutos antes.
Se tensionaba más el cotejo y la bola seguía siendo dominada por el albiazul con chances como para aumentar la ventaja.
Fueron muchas las fallas del juez del encuentro o más bien de sus asistentes a ambos equipos en el partido, que lo llevaron a desmoronarse completamente.
Fue al minuto 40 donde el partido se fue de las manos, o mejor dicho a las manos, ya que luego de un agresión verbal del número 11 local al juez, que le proporcionó la roja directa, el volante de Lezama se fue a las manos con el árbitro, que intentaron frenar los demás jugadores dentro del campo de juego, pero segundos después el otro jugador expulsado, el número 10, ingresó a la cancha y "ayudó" a su compañero con la golpiza, que fue diluida rapidamente sin llegar a mayores inconvenientes.
Obviamente la decisión del árbitro fue suspender de manera definitiva el encuentro y realizar la denuncia correspondiente a los jugadores, que fueron llevados por la policía a la comisaría.
Injustificada reacción de ambos jugadores, que seguramente recibirán una dura sanción.
Ahora habrá que ver que pasa, aunque por reglamento los puntos tendrían que quedar para la UVE, pero el tribunal puede dar cualquier sorpresa.
Buen partido de Vecinal hasta el momento de la suspensión, que se acerca a los puestos de arriba en la zona.

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